Se trata de la decisión adoptada por el Jurado de la Publicidad de Autocontrol sobre la publicidad difundida por Wuaki T.V. tras la denuncia a través del portal tvinfancia.es, de una reclamación frente a la publicidad de Wuaki T.V. Dicha reclamación fue remitida al Jurado de la Publicidad de Autocontrol por la Comisión Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC), en aplicación del Código de Autorregulación sobre contenidos televisivos e infancia y del Acuerdo de autorregulación sobre contenidos televisivos e infancia de 9 de diciembre de 2004, suscrito por el Gobierno y los principales operadores de TV. La reclamación objetaba la inserción de una escena de dos hombres besándose en un anuncio publicitario difundido en televisión por la mercantil Wuaki T.V., S.L.U, (en lo sucesivo “Wuaki T.V.”).
En fecha 4 de diciembre de 2014, el Jurado ha adoptado su decisión. En dicha decisión se destaca, al igual que lo hiciera el Jurado en anteriores ocasiones en las que ha tenido la oportunidad de pronunciarse sobre cuestiones parecidas (vid. Resolución del asunto “Particular vs. Ikea Ibérica, S.A.”, de 27 de diciembre de 2005 o Resolución del asunto “Particular vs. Abasic, S.L.U.”, de 29 de abril de 2013 que nada cabe reprochar a una publicidad que se limita a plasmar una situación que, en la actualidad, es plenamente legal y legítima. En definitiva, difícilmente podría ser calificada como contraria al contenido del Código de Conducta una publicidad que se limita a reflejar una escena en la que dos hombres muestran su amor en público mediante un beso.
El colectivo gay reaccionó con estupor tras conocer que Autocontrol, asociación para la autorregulación de la publicidad, investigaba la pertinencia del anuncio de Wuaki.tv por aparecer dos hombres dándose un beso en la boca. Para Eugeni Rodríguez, presidente del Front d’Alliberament Gai de Catalunya (FAGC), la denuncia, formulada por un telespectador y transmitida a la asociación a través de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), denota una actitud «homófoba». Autocontrol alegó que traslada «cualquier reclamación» a su jurado para que la examine y evitó más declaraciones por confidencialidad.
