El 70% de las empresas españolas es optimista respecto a la evolución futura de la economía. LLORENTE & CUENCA, consultoría de comunicación en España, Portugal y América Latina, presentaba este miércoles la V edición del Estudio sobre las Relaciones Empresa-Gobierno en América Latina, España y Portugal. Según los resultados de la encuesta, la confianza de los empresarios y políticos españoles en las instituciones del país es baja.
Los empresarios españoles valoran muy poco a los sindicatos de su país (tras los directivos dominicanos, son los que otorgan el menor índice de confianza a las organizaciones sindicales, de 1,6 en una escala de 1 a 5). Tampoco los partidos políticos gozan de la confianza de los empresarios españoles (más del 85% declaran que les inspiran ninguna o poca confianza), aunque ésta es ligeramente superior a la que sienten por los sindicatos (al contrario de lo que sucede en América Latina).
El nivel de confianza de los directivos españoles en el Gobierno es un poco mayor, aunque también bajo (está en la media del conjunto de países analizados con cerca de un 2,4 sobre 5). Prácticamente es el mismo que el generado por instituciones privadas como los bancos y los medios de comunicación, con una notable diferencia de apreciación con América Latina donde la confianza es superior.
La institución en la que más confían los empresarios españoles es el Ejército, por encima de la media latinoamericana (en España, no hay ninguna otra institución que logre superar el nivel de aprobado, 3 en la escala 1-5). Resulta significativo el poco aprecio que manifiestan los directivos españoles en sus organizaciones empresariales (éste es el único país en el que esta institución suspende entre los empresarios).
Aunque la confianza en la Justicia que se registra en España, por parte de los empresarios, es superior a la que genera el resto de instituciones, a excepción del Ejército (sin llegar a la aprobación), la sensación predominante en cuanto a la seguridad jurídica es de cierta inquietud, con casi un 40% de los entrevistados que la encuentran baja.
Confianza en la economía y política económica: Los empresarios españoles perciben una clara mejoría en la situación económica desde hace un año, siendo casi dos tercios del total de entrevistados los que lo indican. Tienen una visión negativa cerca del 15% de los que respondieron a la encuesta (en contraste con el porcentaje superior al 40% de empresarios de Latinoamérica que perciben un empeoramiento). La mayoría de los políticos en España comparten la mirada positiva de sus empresarios.
Existe también un gran optimismo entre los directivos de empresas españolas acerca de la evolución futura de la economía, ya que se acercan al 70% los que vaticinan mejoras y sólo representan el 6,6% los que temen que vaya a peor (es el país más optimista, junto a Colombia, de todos los analizados). También los políticos son optimistas en España respecto de la economía, aunque en un porcentaje ligeramente menor al de los empresarios.
La confianza de las empresas en la política económica registra un nivel especialmente bajo, de 2,29, (sólo en Argentina y en Brasil es aún más bajo). Respecto a la percepción de la ayuda que la política exterior presta a la actividad empresarial en el extranjero, la nota obtenida es inferior a la media de América Latina) con un 2,59 sobre 5. Los empresarios de España creen que su influencia en la definición de la política económica es muy limitada (apenas supera el índice de 2,5). El único concepto en el que dan un aprobado (superior al registrado tanto en el conjunto de América Latina como en Portugal) es en el de su conocimiento de la política económica del Gobierno.
La medida específica que más reclaman los directivos españoles es incentivar la economía emprendedora. Sin embargo, los políticos entrevistados en España priorizan más el impulso al I+D+i (que para los empresarios ocupa el tercer lugar). El segundo lugar entre las prioridades de los empresarios está ocupado por la necesidad de reorganizar la estructura del Estado (los políticos mencionan como urgentes, en segunda posición, los incentivos a emprendedores y la cualificación laboral). También marca un porcentaje importante de los empresarios la lucha contra la corrupción como urgente, aunque los políticos que contestaron al cuestionario no la mencionan.
El liderazgo: En España los empresarios marcan la honradez como cualidad preferida de los políticos en un porcentaje similar a la media del conjunto de países (superior al 80%). Después, se fijan en la capacidad de resolver los problemas y en la eficiencia. La figura política a nivel global más mencionada por los empresarios en España es Ángela Merkel, seguida por Barack Obama. Por su parte, los políticos españoles que se pronunciaron sobre las cualidades exigibles a un empresario señalaron también la honradez como prioritaria, marcando después la capacidad de solucionar problemas y la eficiencia. Los empresarios de talla internacional más citados por los representantes públicos españoles fueron Amancio Ortega y Bill Gates.
Elaborado por d+i LLORENTE & CUENCA, el Centro de Ideas, Análisis y Tendencias de la Consultora de comunicación, junto con Inmark Estudios y Estrategias, y con la colaboración en España de APD, el estudio profundiza en las relaciones existentes entre las empresas y el gobierno de 9 países de América Latina, España y Portugal. La presentación ha ido a cargo de José Antonio Llorente, Socio Fundador y Presidente de LLORENTE & CUENCA, Enrique Sánchez de León, Director General de APD y Manuel López, Presidente de Inmark, quienes han explicado el objetivo del estudio, los datos técnicos y las principales conclusiones globales y sobre la realidad en España.
Para el estudio se han entrevistado a más de 2.500 empresarios y políticos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú, República Dominicana, España y Portugal. La muestra en España ha sido de 941 entrevistas, de las cuales el 96,4% corresponde a empresarios y el 3,6% restante a políticos.
