Rajoy participa en el Foro Mundial de la Comunicación en Madrid: "Vuelven fenómenos antipoliticos y nacionalismos excluyentes en nuestro país"

Rajoy felicitó a la global allíance por elegir Madrid y a DIRCOM, por su empeño y determinación en esta iniciativa y organización del congreso. «Madrid acoge hoy a más de 800 congresistas de 65 nacionalidades distintas calificados por sus organizadores como os JJOO de la comunicación». El Presidente del Gobierno explicó que «Vivimos en un mundo en que nada nos es ajeno y nada puede resultarnos indiferente. En unas horas parto a China, un país antes muy desconocido, y hoy una gran potencia y una enorme plataforma de oportunidades económicas y comerciales. Antes una realidad lejana y hoy ineludible en pleno siglo XXI. Hace cuatro siglos John Donne, escribió, «¿Por quién doblan las campanas?». «Su lúcido poema tenía una base metafísica pero hoy el principio moral de aquellos versos, «ninguna persona es una isla -la muerte de cualquier me afecta porque me encuentro unido a toda la humanidad- se ha transformando en un hecho empírico. Una idea que hemos incorporado a nuestras vidas de manera abrumadora y que afecta hasta a los aspectos más privados de nuestra existencia».

«El mundo se ha hecho más pequeño y nuestras vidas se han acelerado como consecuencia de la comunicación los avances de la tecnología nos ha permitido comunicarnos más y mejor. Gracias a ello el mundo avanza a toda velocidad al sueño de convertirse en un espacio común en materia económica e incluso política. Este es el siglo de la globalización y de la desaparición de fronteras. Pero también el de los cambios acelerados. Los acontecimientos se producen de manera vertiginosa. El valor de la comunicación en las las sociedades modernas es tal que ninguna de las organizaciones ni de las empresas pueden permitirse el lujo de descuidar su forma de comunicar. Lo saben mejor que yo porque se enfrentan a ese reto todos los días en un entorno cada vez más digital, más global y más cambiante. Para los gobiernos y responsables políticos esa exigencia es aún mayor si cabe. Debemos tener determinación para poner en marcha las reformas necesarias para que nuestros países sean competitivos y tengan presencia en esa economía globalizada. Debemos tener la flexibilidad para afrontar una situación de cambio constante. No resulta fácil. en esta sociedad con exceso de información cuesta un enorme esfuerzo hacer lo que decía aquel poeta español, Antonio Machado: «pararse a distinguir las voces de los ecos».

Y hablo de España y como entre todos hemos logrado cambiar notablemente su percepción internacional. Cuando hace dos años Madrid fue elegida como sede de este congreso, era difícil siquiera imaginar el cambio de imagen en el exterior de nuestro país. En aquel entonces España era un país al borde de la quiebra y del rescate. Habíamos perdido la confianza de los inversores internacionales. Nuestra prima de riesgo alcanzó los 639 puntos y el tesoro pagaba la deuda a más del 7%. En años precedentes se habían destruido 3,5 millones de puestos de trabajo y la vida de los ingresos públicos se había desplomado en una magnitud de de 70.000 millones de euros. Que nadie se extrañe si estos sucesos llevaron a nuestro país a la pérdida de la autoestima y a sufrir el círculo vicioso de a pérdida de la credibilidad, la confianza, y de la reputación, valor fundamentales para sobrevivir en la era de la globalización».

«Ante nosotros encontramos grandes retos, cómo devolver la esperanza a un país in esperanza? ¿Cómo recuperar la prosperidad a un país que la había perdido y donde parecía no haberla, recuperar la confianza y volver a creer en nosotros mismos? Por suerte teníamos la baza ganadora en la que siempre hemos creído en los momentos más difíciles de nuestra historia como nación. La sociedad española. Una sociedad responsable y cohesionada entorno a los valor de la solidaridad y el esfuerzo compartido. Como no tengo tres horas para explicar todas las reformas realizadas, por suerte para vda, permítanme usar una palabra clave: reformas». «No hablo de medidas aisladas ni disposiciones obligadas desde fuera. Hablo de un cuerpo integral de enromas fruto de la convicción de un gobierno cuya razón de ser es el espíritu reformista. En poco más de dos años hemos acometido una labor reformadora sin precedentes. Hemos reestructurado la parte del sector financiero con problemas. Aprobamos una reforma laboral que nuestras empresas la competitividad perdida. Hemos introducido reformas en pensiones, las administraciones públicas, la calidad de la educación o el sector energético.

«Reformas dentro y fuera del ámbito autonómico, como la Ley de transparencia entre las más modernas de los países desarrollados. Los resultados de tanto esfuerzo son que hemos pasado de la recesión economia al crecimiento. De la inseguridad a la confianza. De la destrucción de puestos de trabajo a la creación neta en el último trimestre. Es España la que ha llegado a la recuperación, por nuestros propios méritos y es que un país es mucho más que su Gobierno. Son sus profesionales, sus empresas, su sociedad civil».

«Todos hemos estado comprometidos con un gran objetivo común, un gran objetivo nacional: Hacer lo necesario para superar la crisis, recuperar el bienestar perdido y devolvernos la ilusión. Pero teñimos teniendo el enorme problema que es el desempleo». «Un problema nacional pero sobre todo un drama individual de los que aún no han podido tocar con sus manos los resultados de la recuperación. esa es la principal razón para no caer en la autocomplacencia. Sería el mayor error que podríamos cometer. No vamos a quedarnos a medias. Relajación cero. Vamos a llegar al final que es acabar la legislatura con un ritmo sostenido de creación de empleo y de crecimiento económico. Vamos a cruzar la línea de meta de una España mejor».

«A mi me gustaría que completen su visión de España con esta otra. Con el país con algunas de las mejores escuelas de negocios del mundo y Europa. El país que esta en algunos de los primeros puestos en lo editorial, automovilismo, finanzas y seguros, telecomunicaciones, textil, belleza y mil y un sectores más. Según la revista Euromoney, el mejor banco del mundo y el mejor de Latinoamérica son españoles? Que nuestra administración electrónica ha sido premiada por la ONU? Que el 40% de las concesiones de transporte del mundo las gestionan o construyen siete empresas españolas? Empresas que están detrás de el Canal de Panamá, de la nueva línea de Metro de Lima, o del tren de Alta Velocidad entre la Meca y Medina, de autopistas de EEUU y un sin fin de grandes proyectos en todo el mundo?». «¿Sabían que el tráfico aéreo alemán es gestionado por una empresa española y que otra es líder mundial en energías renovables? Sabían que no siquiera en esta crisis hemos dejado de tener uno de los mejores sistemas de protección social del mundo, una de las mejores sanidades públicas, no hemos dejado de ser líderes mundiales en trasplantes?».

«Somos 47 millones de ciudadanos que vivimos en un estado con seguridad jurídica que forma parte de la comunidad Europea que a su vez es la comunidad de derecho más grande y el mercado mayor del mundo. Que somos mediterráneos pero nos sentimos también atlánticos y miembros de la comunidad latinoamericana. Los españoles somos un ejemplo de como nuestras leyes garantizan y protegen la pluralidad de nuestra sociedad convirtiéndolas en una fuerza de la que nos beneficiamos todos. Y ese y no otro es el espíritu europeo. Un espíritu que es necesario cuidar y fortalecer entre todos. La crisis ha hecho resucitar fantasmas del pasado que creíamos olvidados. Hoy fenómenos antipoliticos y los nacionalismos excluyentes vuelven a germinar en el seno de nuestras sociedades abiertas. Y nuestro compromiso como demócratas europeos es estar a la altura del momento y responder a nuestras convicciones para que esos radicalismos no rompan el sueño europeo que tanto nos ha costado construir y que tan necesario es en estos momentos en el mundo que vivimos».

«En España a nuestra manera lo estamos viviendo. En nuestro país existen proyectos para levantar fronteras entre iguales, diques a la prosperidad, y erradicar la pluralidad de identidades tan consustancial a las sociedades modernas. Es la fuerza moral de la unión y la concordia. Es darnos la mano y no la espalda. Es la convivencia y no la auto exclusión. El futuro es el más potente sentimiento de pertenencia que atesoramos todos los humanos. Un futuro que se enriquece día a día en la experiencia de la diversidad y que se empobrece con la imposición de una falsa homogeneidad. El signo de la modernidad es la abolición de las fronteras. Porque como ha dicho en Bilbao la Nobel rumano alemana Herta Muller,’ el significado profundo de la palabra «frontera» es aterrador’. Este es mi país. Como millones de españoles me siento orgulloso de el, y de todos los que forman partee de el. Sean de donde sean. Piensen como piensen. Somos así. plurales y diversos. Un país que luchado unido contra la crisis y que sale paso a paso, más fortalecido. Un país que deja atrás lo peor de la crisis y afronta un futuro con un justificado derecho a la esperanza. Y si he logrado convencerles de que España es un valor que cotiza al alza, les pediré un favor, que transitan este mensaje a todos los que Vds. Puedan llegar, que cuenten nuestra historia y que pasen la voz».

No Comments Yet

Leave a Reply

SUSCRÍBETE AL BOLETÍN

Regístrate para recibir las últimas novedades del Programa de La Publicidad en tu email