Malestar y preocupación en el sector publicitario por el veto a los anuncios de combustibles fósiles y nuevas restricciones al consumo
La norma ha sido recibida con malestar generalizado en sectores empresariales, energéticos y publicitarios, por el sesgo ideológico del texto y su desconexión con las urgencias reales de ciudadanos y empresas.
La gestión institucional del incidente ferroviario en La Sagra que ha afectado a más de 29.000 viajeros y 107 trenes por la avería en la catenaria entre Yeles y Villaseca de la Sagra ha sido duramente criticada
Mientras no se garantizan servicios básicos de transporte ni se da respuesta a incidentes que afectan a miles de usuarios, el Ejecutivo prioriza una legislación que ni estaba contemplada en los compromisos electorales ni responde a una demanda ciudadana inmediata
El texto, que aún debe pasar por la fase de información pública, no solo limita la publicidad de combustibles fósiles, sino que veta los vuelos peninsulares cuando haya una alternativa más limpia.
No está prevista la forma de aplicarlo a los viajes de campaña de los partidos firmantes de la ley
Mientras miles de viajeros pasaban hasta 15 horas sin asistencia tras incidencias graves en la red ferroviaria, sin respuesta efectiva del Ministerio ni de RENFE, el Gobierno ha decidido centrar su atención en un nuevo frente: prohibir la publicidad de productos vinculados a los combustibles fósiles.
El anteproyecto de ley de consumo presentado esta semana contempla un amplio catálogo de restricciones a la comunicación comercial: desde vetos a los anuncios de gasolina o vuelos cortos, hasta nuevas cargas para la industria tecnológica por la obsolescencia programada.
La norma ha sido recibida con malestar generalizado en sectores empresariales, energéticos y publicitarios, por el sesgo ideológico del texto y su desconexión con las urgencias reales de ciudadanos y empresas.
El contraste resulta evidente. Mientras no se garantizan servicios básicos de transporte ni se da respuesta a incidentes que afectan a miles de usuarios, el Ejecutivo prioriza una legislación que ni estaba contemplada en los compromisos electorales ni responde a una demanda ciudadana inmediata.
El programa y los folletos de campaña prometían transición ecológica justa, pero no recogían restricciones que afectan directamente a la libertad publicitaria,
El programa y los folletos de campaña prometían transición ecológica justa, pero no recogían restricciones que afectan directamente a la libertad publicitaria, a la oferta de movilidad y al funcionamiento del comercio.
El texto, que aún debe pasar por la fase de información pública, no solo limita la publicidad de combustibles fósiles, sino que veta los vuelos peninsulares cuando haya una alternativa más limpia, prohíbe anuncios de vehículos con motores tradicionales, restringe el lenguaje sobre sostenibilidad y obliga a asumir nuevos costes por reparaciones tras el periodo de garantía. Para buena parte del tejido empresarial, especialmente pymes, el anteproyecto representa una carga más en un contexto de incertidumbre económica.
Mientras tanto, los pasajeros siguen esperando explicaciones sobre su abandono en estaciones y trenes paralizados. Y la confianza en que las prioridades políticas respondan al interés general se ve cada vez más comprometida.
Ni el ministro de Transportes, Óscar Puente, ni el Ministerio emitieron disculpas públicas en primeras 24h
Mientras tanto ni el ministro de Transportes, Óscar Puente, ni el Ministerio emitieron disculpas públicas, comunicados oficiales ni anunciaron ayudas compensatorias durante las primeras 24 horas del nuevo caos ferroviario
Fueron los ayuntamientos locales —como Villaseca, Pantoja, Cobeja o Yeles— quienes movilizaron recursos de emergencia, repartieron agua, víveres y pañales, y ofrecieron transporte alternativo o alojamiento a los pasajeros atrapados