Los beneficios antes de impuestos de la editorial apuntan, pese a todo, a una mejora tras los 50 millones de pérdidas del 2012, tras un importante ahorro de costes y un 28,9% de aumento de ingresos en formato digital ingresos de 64 millones de euros. Uno de los principales ahorro fue de 10,5 millones en costes de impresión, y una reducción en la paginación con un rediseño, recorte de su redacción con un programa de retiro voluntario. Los ingresos en prensa offline de The Guardian y Observer cayeron 12,6 millones por las caídas en publicidad y ventas. Los ingresos totales se incrementaron ligeramente hasta 224 millones, por encima de los 220.4 millones de euros en 2012.
