Acusaciones cruzadas de falta de independencia e intereses son moneda común en las elecciones a decano del Colegio de Abogados de Madrid (ICAM). En medio, la candidatura oficialista ha contado con la agencia Shackleton. María Lorena Ruiz-Huerta García de Viedma, presidenta de la Asociación Libre de Abogados (A.L.A.) y candidata a Decana del ICAM, ha acusado a los otros tres candidatos Antonio Hernández-Gil, Javier Cremades y especialmente a Sonia Gumpert, de estar patrocinada por la editorial Difusión Jurídica y contar con el apoyo del Grupo ISDE, una escuela catalana de formación jurídica. Gumpert -según teinteresa.es- declara no ser catalana y que su candidatura es independiente, aunque hasta hace pocas semanas la mayoría de los abogados madrileños no habían oído hablar de la abogada, con una poderosa campaña publicitaria de folletos, emails, fiestas con copas gratis y carteles ante la misma puerta del Colegio de Abogados de Madrid. Para Ruiz-Huerta el ISDE es la principal escuela de formación jurídica de Barcelona, y tiene fuerte influencia sobre el Colegio de Abogados de esta ciudad. Incluso la financiación de la web de la precampaña de Sonia Gumpert habría corrido por cuenta del ISDE, mientras su director, Juan José Sánchez Puig, es miembro de su candidatura, mientras que la propia Sonia Gumpert y dos candidatos más de su lista forman parte del claustro y el consejo académico del ISDE.
Ruiz-Huerta también desveló que la encuesta lanzada a los medios de comunicación al comienzo de la campaña, que situaba a Sonia Gumpert como favorita en intención de voto, fue realizada por la empresa CIMA, consultora de marketing jurídico del ISDE, mientras otro miembro de la candidatura, Maite Nadal, forma parte del consejo económico del Grupo ISDE. Ruiz-Huerta explicó que sus datos se han obtenido de la prensa y no han sido desmentidos. «Lo reprochable es que escondan estos apoyos. Los votantes tienen derecho a conocerlos. La gente tiene que saber quienes son los grupos que apoyan a estas candidaturas, pues podrían poner al Colegio, que es un organismo público, al servicio de unos intereses particulares”. La editorial Difusión Jurídica también apoya la candidatura de Gumpert, y ésta encargó su encuesta a la empresa CIMA, cuyo domicilio social coincide con el del ISDE, y en la web de dicha empresa se dice que CIMA gobierna los principales medios de comunicación del sector jurídico, como son Economic & Iuris, que publica la editorial Difusión Jurídica”.
Ruiz-Huerta aclara que acusa a Gumpert no de corrupción, pero sí de falta de transparencia. «Gumpert dice que la campaña la financia su propio despacho, pero a nuestro juicio es evidente que cuenta con el apoyo de este grupo. No sería descabellado pensar que podrían apoyar a Gumpert con el propósito de luego hacerse con el control del Colegio de Abogados de Madrid”, comenta. Sonia Gumpert ha reafirmado su condición de madrileña y acusaba a sus adversarios de “anticatalanes” en Teinteresa.es, y reconoce sin ambages su vinculación con el Grupo: “soy profesora del ISDE desde hace 12 años. Se trata de una plataforma que me ha dado gran apoyo, un apoyo de personas como, por ejemplo, Juan José Sanchez Puig, quien es el director del instituto donde se imparten los masters del ISDE. Su apoyo es obvio, pues va como diputado en la lista que presido”, señala. En cuanto al soporte económico Gumpert precisa que “los diputados de mi lista son los que aportan los medios necesarios, de su bolsillo. La candidatura oficialista de Hernández-Gil no ha querido hablar del gasto que ha hecho en publicidad, aunque ha contratado a Shackleton, que es una de las agencias publicitarias más importantes del mundo. Nuestra candidatura se ha gastado 30.000 euros y ha sido una campaña hecha básicamente por email”.
Sobre la vinculación de Difusión Jurídica con el Grupo ISDE, Gumpert no la niega, pero matiza que para su campaña no se ha servido de la importante base de datos de la editorial, sino de la que el Colegio de Abogados de Madrid pone al servicio de todos los candidatos y en la que salen los correos de los compañeros ejercitantes y no ejercitantes. Sin embargo, desde fuentes cercanas al propio Colegio de Abogados de Madrid niegan rotundamente que el ICAM facilite sus bases de datos a cualquiera de sus candidatos. De hecho, solo concede que se realicen dos envíos publicitarios por email a cada candidatura, unos envíos que además realiza el propio Colegio. Y la propia normativa electoral del ICAM prohíbe tener acceso o utilizar esta base de datos, y mucho menos utilizarla durante en campaña.
En cuanto a la vinculación de CIMA con el grupo ISDE, Gumpert responde que “no la pongo en duda, estos datos son públicos; se trata de una empresa que está especializada en el ámbito jurídico. La encuesta la han publicado medios muy serios como ABC o Europa Press, por lo que no se puede poner en entredicho su independencia”. Gumpert considera que si sufre una campaña de infundios es porque su candidatura desestabiliza al poder establecido. “¿Por qué no se dice que hace cinco años el Grupo ISDE apoyó la candidatura de Hernández-Gil? Lo que somos está en nuestra web, lo injusto es la no presunción de independencia. Suponer que porque soy profesora del ISDE voy a poner el ICAM al servicio de esta escuela es una barbaridad. Esto sería tan injusto como decir que las personas que ejercen la abogacía en determinados despachos van a poner el Colegio al servicio de los mismos. Si mi candidatura no supusiese un peligro para el poder establecido, nada de esto estaría pasando”.
Curiosamente Gumpert presenta en su programa electroral potenciar la educación jurídica de los abogados para que, a través del Colegio, opten a una formación permanente, actualizada y on line -propia de un centro de estudios-; la segunda, sería aunarse con otros Colegios de Abogados de España para, entre otras actividades, facilitar el intercambio de sedes.El final de la contienda electoral acabará el próximo día 18, tras el voto de 66.000 abogados madrileños al próximo Decano de su Colegio.
